Mostrando entradas con la etiqueta COMPASIÓN. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta COMPASIÓN. Mostrar todas las entradas

domingo, 11 de junio de 2017

CONFERENCIA AMOR Y COMPASIÓN -S.S. Ratna Vajra





El amor y la compasión son estados emocionales que remedian los desequilibrios afectivos y fomentan una felicidad genuina y sostenible. De acuerdo al budismo, la milenaria ciencia contemplativa de la India, y a los más recientes estudios de la psicología, el amor y la compasión son prácticas clave para dotar de sentido, plenitud y fortaleza nuestra vida, al tiempo que fomentan nuestra implicación en la mejora del mundo social y ecológico que nos rodea.

En esta conferencia, S.S. Ratna Vajra, cabeza de la escuela Sakya y segundo en jerarquía en el budismo tibetano después de S.S. el Dalai Lama, explicará cómo introducirnos y desarrollar estas dos cualidades, así como el modo de aplicarlas en nuestro día a día.

jueves, 12 de julio de 2012

EL ODIO EN NUESTRAS RELACIONES



Cuando la virtud de la paciencia está presente en nuestra mente, es imposible que nos gobiernen los malos pensamientos. Gueshe Kelsang Gyatso.


El odio destruye nuestras relaciones con los demás. Cuando convivimos con una persona, a menudo nuestra personalidad, intereses, prioridades y costumbres entran en contradicción con los suyos. Puesto que pasamos la mayor parte del tiempo juntos y conocemos sus defectos, resulta fácil criticarla, enfadarnos con ella por el menor motivo y culparla de hacernos la vida insoportable. Si no nos esforzamos por controlar nuestro enfado en cuanto surja, nuestra relación se deteriorará. Aunque dos personas estén enamoradas, si se enfadan con frecuencia, sus momentos de felicidad irán disminuyendo. Finalmente, llegará un momento en que antes de terminar una discusión, estarán empezando otra. Como una flor rodeada de malas hierbas, es imposible que el amor sobreviva en estas condiciones.


En una relación de pareja, todos los días tenemos motivos para enfadarnos. Por lo tanto, para evitar el resentimiento, debemos controlar el enfado en cuanto surja en nuestra mente. Después de cada comida, fregamos los platos sin esperar a que termine el mes, puesto que no queremos vivir en una casa desordenada ni tener que hacer al final un enorme trabajo. De igual modo, debemos esforzarnos por limpiar la suciedad de nuestra mente lo antes posible, porque si permitimos que se acumule, nos resultará cada vez más difícil hacerlo y pondremos en peligro nuestra relación.

 Debemos recordar que cualquier situación en la que vayamos a enfadarnos es también una oportunidad para practicar la paciencia. Además, una relación llena de dificultades nos ofrece la posibilidad de eliminar la estimación propia y el aferramiento propio, las causas verdaderas de todos nuestros sufrimientos. Si ponemos en práctica las enseñanzas sobre la paciencia, podremos transformar nuestras relaciones en oportunidades para el desarrollo espiritual.

Con el odio convertimos a los demás en nuestros enemigos. Existe la idea generalizada de que el enfado surge cuando nos encontramos con una persona que nos desagrada, pero en realidad es nuestro propio odio el que transforma a esa persona en nuestro enemigo. El que tiene tendencia a enfadarse vive en un mundo dominado por la paranoia y siente que todos son sus enemigos. La falsa creencia de que los demás lo odian puede incluso causarle la locura, y convertirse así en víctima de sus propios engaños.
Facilitado por: http://sarvavita.com/

lunes, 29 de agosto de 2011

En Busca de la felicidad















Imagen © Christian Lendi.
El propósito de nuestra vida no es sólo resolver nuestros problemas, y obtener felicidad para nosotros mismos. El propósito de nuestra vida es ser de utitlidad para los demás, ya sea para uno o para muchos más. Este es el sentido de nuestra vida, nuestra responsabilidad universal.  Si no tienes compasión nadie recibe la paz y la felicidad que tú puedes ofrecer, pero si la desarrollas, toda la paz y la felicidad que experimentan los seres, la reciben de ti. Por lo tanto, tienes la responsabilidad universal de llevar paz y felicidad a todos y cada uno de los seres que sienten. Al no causar perjuicio a nadie, estás ofreciendo paz y felicidad a todos los seres. Lama Zopa Rimpoche.


Se vive hoy en día en un mundo donde todo es competir, ser el mejor, lograr objetivos y metas, sumergidos totalmente en uno mismo, en nuestro ” yo “, muchas veces no importa el cómo se van a lograr los objetivos, lo importante es conseguirlo, sin importar si se daña a alguien directa o indirectamente.  El propósito es la felicidad?, pero  de qué tipo de felicidad se está hablando?  de una felicidad  temporal y egoísta?. Hoy lo consigues, mañana lo olvidas, todo esto es causa de nuestro “yo” neurótico que no para de vivir en deseo tras deseo,  haciendo perderse en el mundo del ego.

Todos buscamos ser felicices, pero si se desea ser verdaderamente feliz, no hay que olvidar que la felicidad es compartida y  que todos los seres  esperan ser felices, somos seres interdependientes, nos necesitamos unos a otros para ser feliz.

Si no hay compasión en tu corazón, lo que queda es el ego, la mente egocéntrica. Esto significa que tu vida entera está dedicada a tu propia felicidad. Y qué pasa con los demás?. Por eso es tan fácil chocar con los demás cuando te encuentras bajo la influencia del ego. La mente egocéntrica  causa  problemas,  dificulta  las  buenas  relaciones,  crea  desarmonía. Cuanto más poderoso es el ego, mayores son los problemas que se  experimenta en tu vida. A los demás  les  resulta  difícil  permanecer  a  tu  lado y si  alguna  vez  encuentras un amigo, tu ego y las otras emociones se encargarán, tarde o temprano, de transformar a tu amigo en enemigo, pues el ego genera apego y el apego provoca enfado.

Facilitado por http://sarvavita.com